Free Shipping
El shipping es, en definitiva, toda la línea de transporte de la mercancía, desde la tienda al cliente. Hasta ahora, el formato más convencional ha sido mediante la subcontrata de un transportista, sea en régimen de envío o almacén y envío.
Shipping, esa parte de la gestión del eCommerce en la que el vendedor pone la mercancía en manos de un transportista, para que llegue al cliente. Un aspecto clave en la transacción, en la que, muchas veces, ambas partes deben confiar en el buen término sin saber qué ocurrirá en el trayecto. Para el cliente es, quizá, el punto de mayor tensión: se suman la espera e incertidumbre. Para el eCommerce, es un elemento más de la gestión del negocio, pero, sin duda, es uno especialmente relevante.
Ha surgido un nuevo modelo como alternativa a la subcontrata, en el modelo de autogestión, la empresa se encarga, personalmente, de todas las fases de la transacción (incluido el transporte). Es un modelo que hoy resulta muy caro para cualquier negocio.
Asimismo, el shipping es un aspecto del eCommerce en el que el vendedor debe confiar en la profesionalidad del transportista, para cumplir, de cara al cliente, con plazos y recepción adecuada del artículo. Es un eslabón crucial. Pero la logística también debe observarse desde el punto de vista económico. Los costes operativos del transporte son importantes.
En cada uno de estos negocios, ya sea en la autogestión o en la subcontratación de trasportistas, es fundamental la ubicación de nuestro centro de distribución, para acotar los tiempos de entrega, y entregar el mejor servicio”
Asimismo, el shipping es un aspecto del eCommerce en el que el vendedor debe confiar en la profesionalidad del transportista, para cumplir, de cara al cliente, con plazos y recepción adecuada del artículo. Es un eslabón crucial. Pero la logística también debe observarse desde el punto de vista económico. Los costes operativos del transporte son importantes.
Cada eCommerce tendrá el modelo logístico que mejor se adapte a sus necesidades.
• Dropshipping. El eCommerce conserva su propio almacenaje, pero subcontrata el aspecto comercial. El proveedor recibe los pedidos y suministra los artículos hasta el cliente, por sí mismo.
• Cross-docking. El stock es nulo o mínimo, ya que todo el producto se almacena y se gestiona externamente. Esto es posible porque la mercancía fluye, directamente, a través de la instalación, cuando se hace un pedido, sin que haga falta almacenarla.
• Click & collect. Para negocios que ejercen un modelo online y offline simultáneamente. En este caso, el cliente compra online y recoge el pedido en la tienda. Esto favorece el contacto con el cliente y minimiza el riesgo de devoluciones.
• Smart lockers. El cliente recoge su compra cuando lo desee y acude con su identificación a una taquilla o consigna. Esta es conservada y custodiada por el operador logístico.
• Puntos de entrega concertados. El cliente no paga los gastos de envío y recoge su pedido en un centro de recogida concertado.
Para Francisca Masjuán, Directora comercial de Top Space, “En cada uno de estos negocios, ya sea en la autogestión o en la subcontratación de trasportistas, es fundamental la ubicación de nuestro centro de distribución, para acotar los tiempos de entrega, y entregar el mejor servicio”